Doctor Wady Ramírez Rector Nacional De Uniremhos, Doctor Feliz Farías Rector del Recinto San Cristóbal, Doctora Fátima Hernández Vicerrectora Académica y demás personalidades académicas y administrativas, familiares y todos los graduandos que nos están acompañando.
Hoy nos hemos vestido de gala para celebrar uno de los rituales más importantes que una institución de educación superior puede hacer a favor de la sociedad, sin duda se trata de una experiencia única en la vida no importa cuántas veces se repita en nuestras vidas por qué hacemos público el esfuerzo, la entrega el compromiso, Es por esta razón que es para mí motivo de orgullo estar pronunciando estas palabras con profundo agradecimiento, júbilo y nostalgia en nombre de esta promoción.
Quiero empezar remontándome aproximadamente 4 años atrás de estudios, tiempo en el cual nos encontrábamos próximos a tomar una decisión que marcaría el rumbo de nuestro quehacer profesional. Nuestra única intención era seguir avanzando en nuestra formación académica, personal y porque no espiritual. Soñábamos con adquirir los conocimientos que nos permitieran seguir siendo parte de una sociedad, que cada vez necesita profesionales más íntegros, responsables y comprometidos con un país y agradecemos a toda la familia uniremos por abrirnos las puertas y colaborar con este gran sueño.
Hoy nos convertimos en profesionales dignos de representar nuestra alma mater en la sociedad, con altura, ética y responsabilidad. Al final de la búsqueda, todos los que nos encontramos sentados participando de este solemne acto
coincidimos en seleccionar la universidad uniremos en la cual prima la ética, moral y excelencia académica y la cual nos guío por el camino del crecimiento no solo profesional sino también humano pues “educar la mente, sin educar el corazón, no es educar en absoluto” Aristóteles.
Nos dimos la oportunidad en hacer no solo amigos de carrera sino amigos para toda la vida,
muchos se enamoraron, otros lloraron cuando las notas no eran las esperadas o la que alcanzaba para pasar, otros decidieron cambiar de carrera en el camino o porque no hacer doble programa… Lo importante es que, aunque cada uno tuvo experiencias diferentes y vivió la universidad de manera diversa, hoy todos tenemos algo en común y es que no somos los mismos seres humanos que éramos años atrás.
La Universidad nos transformó, hizo que cambiáramos la manera de ver el mundo, formó seres críticos que ven la realidad con unos lentes diferentes y lo más importante, nos otorgó herramientas para vivir un nuevo rol en la sociedad y con ello el compromiso como hombres y mujeres de transformar. Por lo anterior y después de escuchar una frase de Winston Churchill en la cual afirmaba que “El problema de nuestra época consiste en que los hombres no quieren ser útiles sino importantes” hoy quiero que este discurso no se limite a recordar las vivencias universitarias, sino que mi propósito se extrapola a una reflexión sobre nuestra responsabilidad social, así que me permito hacerles las siguientes preguntas: ¿Qué fin tiene ser parte de la minoría que accede a la educación, sino lo ponemos al servicio de los otros y solo buscamos el bien propio sobre el colectivo? ¿Cómo puedo aportar desde mi rol para detener la decadencia moral, emocional y familiar de nuestra sociedad? ¿Qué estamos dispuestos a hacer para que nuestra sociedad avance y nuestra Colombia avance? Sin importar cuál es la respuesta siempre tengan presente que toda acción o decisión que tomemos, ahora como profesionales, tendrá un impacto no solo en nuestras vidas sino también en nuestras familias, colegas, clientes, pacientes, compañeros de trabajo y todos aquellos que nos rodean.
Recuerda que “eres libre de tomar tus decisiones, pero prisionero de sus consecuencias” Pablo Neruda.
Agradecemos a nuestros familiares. Quienes con tanto esfuerzo y dedicación apostaron por nuestra educación y desearon que llegara este momento en que sus hijos, nietos o sobrinos estuvieran recibiendo su título profesional, infinitas gracias por su compromiso, acompañamiento y sacrificio, gracias por darnos la vida y buscar incansablemente nuestro bienestar, gracias porque siempre fueron nuestro apoyo en este vaivén emocional de la etapa universitaria. Los momentos de alegría por las buenas calificaciones.
A nuestros hijos por permitirnos robarle parte de su tiempo para formarnos, que más adelante nos servirá para formarlos a ellos.
A nuestros maestros por compartir sus conocimientos con nosotros, sin importar cuanto estuvieran dando.
Gracias porque por ustedes amamos nuestras carreras, porque nos inspiran a ser excelentes profesionales tales como ustedes lo son y porque hoy muchos de ustedes se convirtieron en nuestros amigos y confidentes.
Gracias a directivos y administrativos quienes piensan la institución todos los días del año y llevan a cabo proyectos para mejorar la calidad de la educación, instalaciones y clima institucional para que los jóvenes que empiezan sus estudios llenos de sueños, metas, expectativas y ganas de atrapar el mundo con las dos manos, puedan vivir y desarrollarse en esta universidad.
Las insto a seguir formándose, hoy se abre una gran puerta para nosotros, hemos probado la educación y queremos más.
Muchas gracias por permitirme compartir estas palabras con ustedes, felicidades graduandos y les deseo el mejor de los pronósticos para su vida laboral y profesional.
Ya hemos alcanzado el éxito, Gracias Uniremhos. ¡Felicidades!!
Buenas tardes al honorable Rector Dr. Wady Ramírez, Dr. Félix Farías, Director del campus San Cristóbal, Ing. Yocasta Mañón, Vicerrectora administrativa, Lic. Arelis Valenzuela Directora de Registro y demás miembros de la mesa de honor.
Es una distinción para mí estar ante ustedes en representación de todos mis compañeros, hoy graduandos, para darle las gracias en primer lugar a Dios, quien guía cada uno de nuestros pasos, y a la Universidad Eugenio María de Hostos por acogernos en sus campus y brindarnos toda la ayuda en nuestro proceso de formación, a nuestros familiares por su apoyo incondicional, pero, sobre todo, a cada uno de los graduandos que hoy ven coronar su esfuerzo y dedicación.
A nuestros amigos que de manera personal estuvieron con nosotros, a nuestros maestros: Severino Pinales, Teresa Luciano, Mercedes Pérez, Raymond Silva y demás miembros de la comunidad universitaria por su gran colaboración durante este proceso de formación, es muy gratificante para mí al igual que mis compañeros haber formado parte de esta gran familia, sabiendo que de ahora en adelante es un reto para cada uno nosotros, poner en práctica todos los conocimientos adquiridos.
Reconocemos que, con tener sólo el amor de nuestros padres, el ahínco de nuestros maestros, la sabiduría de los libros y el acompañamiento de los amigos no es suficiente, necesitábamos nuestra determinación diaria de abrazar este legado para cumplir nuestra meta, este logro nos llena de muchas emociones, hoy es un día especial para nosotros, 4 años de esfuerzo y dedicación, de descubrir nuestra verdadera vocación.
Días de trabajos increíbles, incluso esas sencillas charlas en los pasillos nos harán recordar esta maravillosa experiencia, somos una clase graduanda muy especial por la situación sanitaria en la que se encuentra nuestro país, estamos listos para irnos a enfrentar todos los retos a partir de ahora, permanezcamos fieles a nosotros mismos y nuestra alma mater la cual agradecemos de todo corazón, permanezcamos unidos y haciendo parte de nosotros la filosofía institucional de nuestra amada UNIREMHOS.
Compañeros, espero que cada uno de nosotros demos lo mejor de sí y que seamos los mejores en el área que cada uno escogimos. Recordemos siempre que nuestro esfuerzo valió la pena. Nunca nos confiemos hasta que lo bueno sea lo mejor y lo mejor sea lo excelente. Ya para finalizar me despido con esta cita de Walt Disney.
“Todos nuestros sueños se pueden hacer realidad, siempre y cuando tengamos el coraje de perseguirlos”.